En
el año de mil novecientos treinta y dos, surge de la mente de dos jóvenes,
hijos de inmigrantes judíos, un personaje que dio origen al concepto de
superhéroe, se trataba del Hombre de Acero.
Superman,
el primer héroe ficticio de la recién nacida industria de la historieta que se
consolidó en la nación de las barras y las estrellas, fue arropado por el
cariño de sus lectores desde el inicio y este viernes estrena en las pantallas su
nuevo filme, Man of Steel.
Golpes,
explosiones, acción y más acción, eso es Manof Steel, la cinta con dirección de Zac
Snyder, la carta fuerte de WarnerBrother´s y la DC para este
verano, protagonizando Henry Cavill,
actor que se catapulta a la fama, personificando al super hombre que deja el
calzoncillo rojo para madurar dentro de este reboot.
El
inicio muestra un planeta Kriptón que agoniza, donde Jor-El trata de advertir la inminente destrucción de su planeta.
Resignado, envía a su hijo, Kal-El, en
una nave que lo llevará al tercer planeta, donde será criado por los granjeros
que ya todos conocemos, donde pasará lo que ya sabemos, con un Clark Kent que se oculta por miedo al
rechazo de los terrícolas.
La
cinta avanza rápido intercalando dos enfoques de la vida de Clark, el primero que presenta al joven
que vive en Smallville, desconociendo
su origen y futuro y el otro, que nos muestra al hombre que se pone la capa
para salvar el mundo.
Su
enemigo, el General Zod, un
kriptoniano que busca a Clark para
someterlo y usarlo para su maligno plan que involucra destruir a la humanidad, es
con quien tiene que luchar, así como con sus secuaces, en una batalla garrafal
con un despliegue de efectos increíbles y vertiginosos.
Henry Cavill se lleva la película con un
Superman muy mesurado que le metió
duro al gimnasio y que sale del estereotipo que había creado Christopher Reeve, mostrando al Superman que muy probablemente
encabezara la posible Liga de la Justicia,
donde ya esta lleno el jarrón de rumores. Aun así, el héroe kriptoniano se
reivindica después del fracaso que fue su última película, que dejó asqueado a
más de uno.
Superman es
la figura ficticia más fuerte del mundo del comic, pero igualmente la más
criticada. Si no fuese creado, otro superhéroe hubiera sido el que inaugurara
el negocio de los superhéroes, sería un mundo sin Superman.
Pero el Hombre de Acero ha sido requerido
para salvar a la tierra y a la industria del comic, como lo fue con su
renacimiento, después de ser derrotado por Doomsday,
revive en lo que era una crisis para el comic, levanto las ventas y regresando
la popularidad del mismo.
Además de eso, Superman es un referente para la
creación de otros personajes como lo son Batman,
Flash, Green Lantern, Spiderman,
Hellboy, todos buscando superar al
invencible Hombre de Acero, siempre tratando de dar un enfoque distinto,
maquinando historias que llevan consigo un fuerte sentido social, esa necesidad
de creer en los superhéroes, la necesidad de admirar a un personaje.
Todo eso es Superman, un origen, un concepto que motiva
a imaginar, crear, superar; es la materia prima de una industria que ha
caminado a pasos agigantados en la industria del cine en los últimos diez años
y que celebra a este concepto dedicándole el presente mes de junio, con lo que se
lanzan productos, comic´s, la película, toda una fiesta que me lleva a la conclusión de que no puedo imaginar un mundo sin Superman.
"Superman.
Yo fui la primera en llamarle así. No fue fácil inventarme un nombre para
alguien que no debería existir. [...] ¿Sabes como quería llamarle de verdad?
"Demasiado bueno para ser cierto."" Lois Lane
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